Los juguetes van cambiando según el paso del tiempo. Hay más tecnología, otras caricaturas, otras películas, otros intereses… pero hay algunos juguetes que, sin importar cuánto pase el tiempo, siguen siendo los que todo padre y todo niño disfrutan. Tú los tuviste, jugaste con ellos, de hecho llegaron a ser tus preferidos entre tantos otros más pasajeros, y ahora son tus hijos los que podrán hacerlo… y tú tendrás la ventaja de volver a jugar con ellos de nuevo.
Lego
Estos ladrillos de colores son de origen danés. La compañía de juguetes, originalmente dedicada a hacer piezas de madera, nació en 1932 y es aún hoy una de las más grandes del mundo. Y no es difícil entender por qué. Sus juegos de construcción dan la oportunidad no solo de crear figuras ya propuestas (como el Halcón Milenario o Hogwarts) sino que dejan espacio para la imaginación sin límites. Lego es una palabra que se conoce en todo el mundo, es un juguete para todas las edades y es uno que nunca aburre… hasta se hicieron varias películas centradas en él.
Playmobil
¿Quién no disfruta de jugar a crear un mundo? Playmobil es otra versión de juego de construcción, que cuenta con esos muñequitos tan reconocibles. En todos sus años ha desarrollado un mundo entero en que existen todo tipo de edificaciones y personajes. Es perfecto para desarrollar la imaginación y crear sin limitaciones.

Monopoly
Puede que nunca hayas terminado una partida, pero ¿puedes negar que la disfrutaste? No, y eso es porque Monopoly es uno de esos juegos de mesa que todos han jugado y todos seguirán jugando. Ya seas el banco, el dueño del Paseo de Castellana o estés en la cárcel, este juego centrado en compra de bienes raíces e inversión es divertido y, sin que lo sepas, una fuente de aprendizaje sobre el mundo adulto.
Simón
Ay todas las veces que perdiste la paciencia por no poder seguirle el ritmo… pero cómo te divertiste. Simón, ese juego de coordinación visual y motora, no solo es entretenido, es también una forma de desarrollar capacidad de atención.
Yoyo
Hubo tiempos en que lo más simple entretenía a todos los niños y eso no tiene por qué pasar de moda. Ahora hay juegos de móvil y ordenadores, pero un yoyo sigue siendo de esos juguetes que son (una vez que lo coges en la mano lo sabes) un entretenimiento como pocos. Aprovecha además para enseñarle a tus niños los trucos que hacías tú junto a tus amigos.
Twister
Puede jugar toda la familia, las reglas son fáciles y te diviertes como nunca… y además estiras. Este juego de círculos de colores en el suelo sobre los que tienes que poner tus extremidades según toque, es simple y perfecto para pasar las horas. Nunca te aburres de él.
Rubik’s Cube
Tal vez eres de esos que alguna vez logró armarlo entero, tal vez solo conseguías completar un lado… lo cierto es que este sencillo juego entretiene a más no poder con su complejidad descarada. Hay trucos, y ahora con Internet es más fácil conocerlos, para completar el cubo. Lo cierto es que siempre puedes enseñar a tus niños a hacerlo… y ver sus caras de emoción cuando lo completen.
Puzzle
También llamado rompecabezas (y no lo es tanto como el cubo de Rubik), este juego de mesa es centenario y con buena razón. ¿Qué puede ser una idea más simple y más divertida? No solo se trata de ingenio y de buen ojo, se trata de visión espacial y de una gigante sensación de logro cuando llegas a terminar la imagen. ¡Ah y siempre puedes enmarcarlo!

Jenga
Un juego de concentración y pulso como ninguno. Para ser solo la de-construcción de una torre de ladrillos de madera, Jenga es realmente algo excepcional. Emociona, produce nervios y divierte a partes iguales… y también puede jugarlo toda la familia.
Quién es quién
Los juegos de mesa deben ser parte esencial de la infancia (o deberían). Son divertidos, se juegan en grupo y los niños los disfrutan durante muchos años (no tienden a dejar de jugarlos tras un año, por ejemplo). Quién es quién es de esos que ha sobrevivido al paso del tiempo porque es un juego simple pero maravilloso. Los niños aprenden a describir y a prestar atención.