Seguimos viajando por España. Esta vez ¡Un día en… Ibiza!
Después de que la semana pasada viajáramos hasta Mallorca, esta vez no salimos de las islas y disfrutamos de un día en… Ibiza. Las medidas restrictivas sobre desplazamientos y movimientos están desapareciendo a medida que la situación mejora.
En Ibiza, con nuestro paseo, descubrirás que es mucho, muchísimo más que discotecas, fiestas y noche. Aunque también hay de eso porque a nadie le amarga un dulce.
Hemos viajado durante las últimas semanas de norte a sur y de este a oeste; desde San Sebastián hasta Sevilla pasando por Plasencia, Madrid y Valencia. Ahora, toca pasar un día en… Ibiza.
Qué ver un día en Ibiza
Para nuestra ruta, primera recomendación, será importante hacerse con un coche familiar para poder viajar todos juntos. La idea es aprovechar el tiempo al máximo, por lo que podréis alquilar algún vehículo en los múltiples puntos que encontraréis en la isla.
Para empezar, primer contacto con la arena y el mar. No tendremos tiempo en un solo día de descubrir sus más de 50 calas y playas, pero escogeremos las más imprescindibles. Empezamos con las de Salinas y Es Cavallet, dos de las más bonitas… pero también de las más famosas, por lo que tocará madrugar para verlas y disfrutarlas en calma. Cerca de la primera de las playas encontraréis nuestra primera parada cultural: La Nave Salinas, un enorme y robusto edificio convertido en espacio cultural en el que podréis acceder sin coste alguno a conocer todo lo que alberga en su interior.
El caso histórico es imperdible. El de Ibiza está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y ofrece dos versiones bien diferentes en función de si es de día o de noche. ¡Recomendación! Disfrutarlo en ambos momentos. Un paseíto, de día, para conocerlo; y un paseíto, de noche, para bajar la cena y descargar las piernas después de un día largo.
Podéis visitar también la zona típica de tiendas, con grandes marcas y tiendas alternativas: Dalt Vila y La Marina. Esta última es la más cercana al puerto, que también merece una visita y más de una fotografía.
Caminar después hasta la Plaza del Parque para conocer uno de los centros neurálgicos de la Isla.
Las vistas de después de comer las podéis encontrar en Es Cubells: un pequeño pueblo pesquero ubicado en lo alto de un acantilado. Las vistas son espectaculares.
Vistas las vistas, valga la redundancia, ¡PLAYA!
Si aún tenéis ganas de más agua, varias recomendaciones para que vosotros, en familia, escojáis la que más os guste:
- Sa caleta.
- Cala Jondal.
- Cala d’Hort.
- Cala Tarida.
- Cala Molí.
- Cala Bassa.
Todas estas calas están distribuidas por el perímetro de la isla y todas y cada una de ellas os ofrecerá una experiencia inolvidable para ponerle la guinda a un día en… Ibiza.
Para la cena os proponemos el especial pueblito de San Agustín. Aprovecharemos para conocer la zona norte de la isla y para degustar alguno de los manjares de la gastronomía local en un restaurante que merece y mucho la pena: Can Berri Vell.
Y si después de cenar tenéis ganas de fiesta (si la familia lo permite), ya sabéis: Pacha, Amnesia, Privilege…
Una forma increíble de acabar las horas de un día en… Ibiza.