Acabamos de vivir el cambio de hora y, aunque algunos ni lo notarán, otros verán su sueño alterado. Y es que, según un estudio de la Comisión Europea, el cambio de horario impacta de manera más significativa en los niños, las personas mayores y los enfermos, es decir, quienes sufren un desajuste de su reloj biológico que regula el sueño entre otros procesos.

¿Tus niños tienen un bajón durante el día?

¿Estamos todos más lentos estos días?

Esto se debe igualmente a la llegada del invierno, que no solo afecta nuestro ritmo circadiano, de 24 horas, sino también nuestro ritmo circanual. Dicho en otras palabras: entramos en modo marmota.

Este es un hecho hoy demostrado por el apasionante análisis de data (46 millones de personas-año) que un equipo israelí ha publicado*: en invierno, nuestro cuerpo se prepara para liberar en primavera un pico de hormonas (de reproducción, de metabolismo, de crecimiento, de estrés, etc.) De ahí la importancia de regular el sueño y adoptar hábitos de marmota.

¿Qué puedo hacer cuando no duermo tan bien o cuando me siento estresado en esta época?

Una respuesta rápida y eficaz que utilizo a menudo en la academia es respirar directamente del frasco el aceite esencial de Lavanda. Los participantes en los talleres llegan con el estrés producido por los horarios, las preocupaciones del día, los nervios, y necesito que hagan un ejercicio de “reseteo” para disfrutar de la charla: 3 inhalaciones profundas de aceite esencial puro de Lavanda les ayudan a sentir una relajación de las tensiones del cuerpo y de la mente*. El efecto es casi inmediato porque el proceso olfativo envía un mensaje calmante a los receptores nerviosos que tenemos en gran cantidad en la nariz.

Y dejo en la mesa un agua perfumada con una gota de lavanda o de mandarina diluida previamente en una cucharita de miel. O les propongo una infusión o un té aromatizados con la misma mezcla. Porque los aceites esenciales puros son complementos alimenticios. Puedes comer bienestar… De hecho, consulta la receta de chuches veganas de la Marmota Mandarina que propongo este mes.

Otro truco que enseñamos en la academia es poner esencias en la rutina de cada noche. Por ejemplo, tomando una ducha aromática, 1 o 2 horas antes de dormir. El calor de la ducha o del baño permite regular la temperatura corporal, un dato importante para preparar el cuerpo para el sueño, nuevamente demostrado por el meta análisis realizado por la unidad de Sueño de la universidad de Texas en 2019. Y si añades una gota de aceite esencial a tu gel de ducha de Lavanda, si hay mucho estrés, o de aceite esencial de Mandarina, si quieres actuar específicamente en la calidad del sueño, te frotarás e inhalarás los vapores aromáticos y calmantes al mismo tiempo.

¡Marmota perfumada!

Cuídate a ti mismo: empieza a meditar con una mezcla de aceites esenciales puros depositados en un saco cervical de lavanda. O, si como a Marilyn Monroe, te gusta dormir sin nada excepto unas gotas de perfume (Chanel nº5 en su caso), prueba con aplicar unas gotas del Spray Relax The Little Green Bottle o de Mandarina en el interior de las muñecas: dormirás como una estrella.

Por cierto, sabías que:

*un aceite esencial es un extracto de plantas aromáticas, que procede de una destilación al vapor de agua de flores y otras partes. Es la esencia más concentrada y completa, con todas sus moléculas activas, y más afín a la piel, pero sin dejar ningún rastro: de allí su rapidez y su eficacia en el alivio de las molestias de la vida cotidiana. Se mezcla con un aceite vegetal para su aplicación en la piel.

*un aceite vegetal es un líquido grasiento que procede de la expresión en frío de semillas o frutos. Contiene ácidos grasos como omega 3 u omega 6, y vitaminas. Se come como el aceite de oliva, o se aplica sobre la piel dejando una película para protegerla, según sus propiedades.

También puedes mejorar el ambiente de tu casa, vaporizando un Spray Relax en las esquinas de la habitación antes de ir a dormir. O si quieres personalizar los productos de limpieza e higiene, puedes lavar el suelo añadiendo 5 gotas de Lavanda al friegasuelos o lavar la ropa añadiendo a la lejía 5 gotas de Mandarina, dependiendo de que te gusten más los perfumes florales o los dulces. Así el propio pijama huele a Mandarina y te envuelve de tranquilidad.

¡Madriguera de la Marmota perfumada!

(mmm, literalmente, en el caso de los que tienen adolescentes, ya que la Mandarina desodoriza por sus monoterpenos, al mismo tiempo que tranquiliza: la Inteligencia de la Naturaleza al poder…)*.

Y así el 2 de febrero, el verdadero día de la Marmota que nos dice si se acaba o no el invierno ese día, estaréis listos para entrar en otro cambio de estación, pero esto es otra historia.

Valérie Aucouturier

The Little Green Botttle

FUENTES:
*Estacionalidad de las hormonas (febrero 2021) – Avichai Tendler y colaboradores https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/33531344/
*Recomendación de la OMS sobre la actividad y el sueño de los niños (2019) https://www.who.int/es/news/item/24-04-2019-to-grow-up-healthy-children-need-to-sit-less-and-play-more
*Guía AA-HA! Sobre la salud de los adolescentes: ver resumen página 2 con mención a los buenos hábitos, entre los cuales el sueño que se ve afectado por los cambios hormonales de esta edad: https://iris.paho.org/handle/10665.2/49181
*De los efectos positivos de la lavanda sobre el sueño, entre muchas publicaciones: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26133206/
*De los efectos positivos en el sueño de un baño antes de ir a dormir: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/31102877/
*De los efectos sedativos de la Mandarina, entre muchas publicaciones: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/33096890/