Como muchos de nosotros Sara Noguera quería cambiar de aires. Estudió Educación Infantil y se especializó en inteligencias múltiples, musicoterapia y cuentoterapia. Y hace dos años, esta madre de cuatro, decidió emprender una aventura propia con Kimudi, una plataforma que, en este poco tiempo, se ha convertido en un referente de un nuevo tipo de crianza basada en el realismo, el respeto y la paciencia.
Actualmente, Kimudi, que cuenta con una comunidad de casi 50 mil personas y sigue creciendo, imparte talleres y actividades consistentes en juegos en familia, grupos o asesorías individuales. Además, Sara, ha también publicado un libro en que reúne mucho de lo que divulga en Kimudi: Enciclopedia para criar y disfrutar del proceso, que consiguió vender 1.500 copias en menos de 12 horas y que actualmente está en proceso de una segunda edición.
Sara será además, a partir de este mes, una de las nueva colaboradoras de la familia Yoyorama.
¿Cómo se inició Kimudi?
Tras ser despedida (o no renovada) dos veces de mi trabajo de maestra (por mi embarazo) decidí apostar por el proyecto que tenía en mente desde hacía tiempo, continué formándome para poder aportar no solo como madre si no como profesional y así, al año y poco, surgió Kimudi.
¿Cuéntanos un poco en qué consiste Kimudi?
Kimudi es un espacio donde intento ayudar a madres, padres y familias a criar con respeto y realismo, apoyados en una crianza respetuosa y con mucho humor. Ofrezco asesorías, talleres, eventos presenciales… un conjunto de opciones donde todo el mundo cabe y donde intento quitar esa aura de perfección que a veces va ligada a la crianza.
Somos imperfectos y hay que contar con ello incluso cuando criamos.
¿Fue siempre un proyecto al que querías dedicarte? ¿Qué hacías antes de Kimudi?
Siempre quise emprender en algo que me hiciera muy feliz y sabía que estaría ligado a los niños y las familias, pero no sabía que acabaría creando este proyecto tan espacial para mí. Antes trabajaba de maestra y en un centro de apoyo educativo.
¿Cuál dirías que es la labor más importante de Kimudi?
Quitar la culpa de los errores, acompañar con empatía y respeto, enseñar a disfrutar de cada avance de nuestra familia y mostrar que, aunque sea difícil criar, merece la pena el esfuerzo.
¿Qué es lo que más disfrutas de Kimudi?
No me puedo quedar con una cosa, todo a día de hoy (menos el papeleo, claramente) me hace muy feliz y me motiva a seguir trabajando y creando cosas nuevas.
¿Por qué crees que en los últimos tiempos se habla más honestamente de la maternidad?
Porque por fin está desapareciendo esa necesidad de ser perfecto y claro, surge la realidad y con la realidad tiene que venir de la mano la información para acompañar dicha “novedad”.
Entender que a parte de madres somos mujeres y que no debemos llegar a todo está ayudando a avanzar con menos presión.
¿Qué significa ser madre para ti?
Dormir mucho menos, saber que hasta la paciencia de puede entrenar y descubrir que se puede querer tanto que acabas llorando de felicidad.
Ser madre es lo más altruista del mundo, porque todo lo haces sin esperar nada a cambio.
¿Cómo es tu rutina en un día normal?
Ojalá tener que despertar a mis hijos, pero no, son bien madrugadores.
Las mañanas son a la carrera entre ropa, desayunos y colegios varios (mi marido siempre los lleva), me meto en Kimudi hasta las 16 y de ahí en adelante estar y disfrutar con los niños hasta las 20:30 que están ya dormidos. Confieso que cuando están dormidos siempre tengo un buen rato más de trabajo, pero sarna con gusto no pica.
A las mujeres siempre se les pregunta sobre el equilibro entre la vida familiar y laboral… aunque es una pregunta para todos. ¿Cómo es ese equilibrio?
Yo por la tarde no trabajo para dedicarme a ellos, es un hecho. Creo que hay mucho que cambiar a nivel estatal para que la conciliación sea algo real y creo que renunciar (laboral o familiarmente hablando) es una constante muy dura a la que tenemos que plantar cara.
¿Qué próximos proyectos tienes entre manos?
Lo digo y lo gafo, pero sin duda cosas increíbles siempre relacionadas con la crianza.
¿Cómo llegaste a colaborar con Yoyorama?
Tuve la suerte de tener una reunión con Arantza y alucinar con el proyecto y con ella. Me parece un lujazo poder colaborar asiduamente con algo que refleja mis valores.
¿Qué te gusta de nuestra página?
Que se respira naturalidad, que está realmente pensado para todo tipo de modelo familiar y que ofrece muchísimas actividades diferentes y originales.