La escalada del precio de la luz ha hecho que modifiquemos nuestras rutinas de consumo energético y Fagor tiene las claves para ayudarnos

Reducir el gasto energético se ha convertido en una prioridad, no solo por el encarecimiento de su coste, sino por el impacto medio ambiental que tiene para el planeta. En Yoyorama estamos muy comprometidos con la sostenibilidad y hemos reunido algunos tips que pueden ayudarte en la misión de mejorar la eficiencia energética.

“La clave del nuevo sistema se encuentra en las rutinas del día a día como poner la lavadora, el lavavajillas o la secadora, por eso, además de nuestra tarifa contratada, es importante contar con electrodomésticos con etiqueta energética y tecnologías eficientes que faciliten el ahorro y el consumo de luz.” asegura Marta Lucas, directora de marketing de Fagor.

La lavadora, a su hora

Encontrar el mejor horario para poner la lavadora se ha convertido en toda una odisea. Adaptar nuestras rutinas a los tramos más baratos de electricidad a veces no es fácil. Por eso tener electrodomésticos con tecnologías que se adapten a estas necesidades es imprescindibles. Las lavadoras de Fagor incluyen por ejemplo un programa nocturno (Silent Wash) que es mucho más silencioso porque no centrifuga. De este modo puedes lavar por la noche y centrifugar por el día ahorrando dinero sin perturbar tu sueño ni el de los vecinos.

Que la lavadora incluya un medidor de carga que adapte el programa a la cantidad de ropa que hay en el tambor y a la suciedad de esta también permite ahorrar luz y agua.

El lavavajillas, tu gran aliado

Ya sabéis yoyoramers que es importante mirar la calificación energética de cualquier electrodoméstico antes de adquirirlo, pero además, haciendo un buen uso de las funciones de los mismos podemos conseguir reducir aún más su consumo mejorando nuestra economía y contribuyendo al cuidado del planeta.

Desde Fagor nos proponen usar el modo ECO y la tecnología Autodoor que abre automáticamente la puerta del lavavajillas cuando ha terminado el ciclo de lavado para que la vajilla se seque al aire y evitar así el ciclo de secado reduciendo por tanto el consumo.

Un cocinado más sostenible

Pero no solo se puede ahorrar energía a la hora de lavar. Durante el cocinado también podemos mejorar los consumos. Con las placas de inducción, por ejemplo. Calientan antes y aprovechan el calor residual del recipiente. Además, como el calor se adapta a este prácticamente no hay pérdida energética.

Cuando cocinas en horno, hay algunos tips que debes tener en cuenta para ser más sostenible. Utilizando el vapor por ejemplo, conseguirás unos platos más saludables y con menor consumo energético.

 

Aprovecha toda la tecnología a tu alcance para reducir la energía que consumimos ayudando a tu bolsillo y a la conservación del planeta. Hay muchos modos de ser más sostenible.