El Principito es uno de los grandes clásicos de la literatura mundial. No caduca y es recomendable releerlo cada cierto tiempo: los matices de la edad aumentan el valor de la lectura.

La literatura mundial ha parido libros, relatos y poemas que han marcado a cientos de generaciones. Novelas como El Quijote, obras de teatro como las de Shakespeare o los ensayos de los grandes filósofos han triunfado entre las sociedades de diversas épocas pero siempre ofrecen lo mismo. Pocos matices podremos encontrar con el paso del tiempo, a pesar de su grandeza, y están todos dirigidos para un determinado público.

Pocas obras literarias son capaces de marcar al mundo entero y muchas menos nos permiten, lectura tras lectura, aportarnos un matiz diferente en función del momento vital que atravesemos.

En este artículo lo que te traemos es una recomendación que nunca va a caducar: El Principito. El éxito de Antoine de Saint-Exupéry fue publicado en 1943 por la editorial americana Reynal & Hitchcock y desde entonces ha sido uno de los regalos más exitosos. Además, en poco tiempo logró convertirse en el libro escrito en francés más leído y traducido.

La historia cuenta cómo el accidente de un piloto en medio del desierto del Sahara le permite conocer a un pequeño Príncipe venido de otro planeta. Las aventuras que vendrán después te toca descubrirlas a ti, y si lo haces revisando juntos El Principito, la experiencia será mucho más especial.

El Principito, una lectura única

La filosofía, la poesía y la novela se dan cita en un pequeño puñado de páginas siempre adornado por las ilustraciones maravillosas que el propio Saint-Exupéry diseñó para la ocasión. Por eso, escojamos la edición que escojamos, lo que es seguro es que no vamos a fallar.

Aquí te dejamos nuestra recomendación para disfrutar en familia. Nuestro obsequio para guardar en tu librería y no dejar de revisar año a año, momento importante tras momento importante. Una lectura que debía ser obligada sin importar la edad del lector. Disfrutarlo en familia y aprender revisando juntos El Principito.

Por Sergio F. Núñez.